-Yo me propongo hacer unas historietas relacionadas con el siglo pasado y con un personaje cubano mambí, nos dice su creador Juan Padrón. Pero las primeras historietas no se enmarcaban dentro de este escenario sino, por ejemplo, era Elpidio Valdés contra los ninjas, nada más lejano a nuestro, país porque las acciones se desarrollaban en Japón. Entonces yo trabajaba para el semanario Pionero con los personajes Ronin y Cachivache.
– Encamino a Elpidio dentro de historietas relacionadas con nuestras guerras de independencia. Me digo, éste es el personaje perfecto para contar a los niños pasajes de nuestras guerras independentistas. Inicio éste trabajo, pero me doy cuenta la necesidad de tener documentación. Como eran los uniformes de los soldados coloniales y cuáles eran sus armas, por ejemplo, y en este aprendizaje comienzo a dedicarle mucho tiempo para proporcionarme de esta documentación.
– Frecuentaba mucho la Biblioteca Nacional, viendo manuales del ejército español, fotografías, etc. Con toda esta referencia, Elpidio se va transformando. Le subo los grados a Coronel, porque para mandar un escuadrón era necesario éste grado.
– Incluyo en las historietas elementos a medidas de descubrirlas como el cañón de cuero, el heliógrafo, usado por ejército español. También el diseño, era un diseño para historietas, pero se deformaba mucho cuando se empleaba en un filme. Pasa por muchas manos, varios dibujantes animadores y los encargados de la línea de relleno, etc.
– En el cine, el personaje sufre cambios, el pelo se hace más simétrico, el bigote, los ojos se cambian, el personaje se hace un poquito más alto. El caballo también cambia, es decir, se hace un proceso de limpieza del diseño y de los personajes. En los filmes hay personajes que desaparecen y aquellos aceptados por los niños se quedan.
– Nosotros nos reuníamos con los pequeños en la ciudad de los pioneros, José Martí y ellos, puedo decir nos asesoraban el trabajo. Por ejemplo, el personaje de María Silvia surge porque las niñas protestaron de la exclusión en las aventuras de un personaje femenino y además tiene el pelo negro y largo como ellas me sugirieron.
Padrón, ¿ utilizas el guión en tus animados? -Yo utilizo un guion, porque en mis películas necesito saber cómo puede desenvolverse el final. Incluso, en las historietas también preveo cómo termina y después vuelvo al principio. Es decir, cuando escribo una historieta las páginas más importantes son la primera, la segunda y el final. Incluso, al elaborar un argumento resuelvo el final y después trabajo en el principio.
¿Y con relación a tú personaje?. -Bueno, con respecto a Elpidio Valdés yo me trace objetivos, como quienes eran sus padres, como se incorporan a la guerra.
– Me planteaba también mostrar el relevo de las generaciones, los del 68 a estos del 95, que se da en la escena del padre cuando cae en combate y antes de morir le entrega el machete a Elpidio.
– También, la participación de la mujer en estas gestas con el personaje de María Silvia, los sectores sociales de aquella época, la caracterización de los españoles y por supuesto los mambises fueron algunos de los objetivos en estos animados.
Con una amplia filmografía y un reconocido prestigio como realizador de filmes de dibujos animados, Juan Padrón se sitúa como uno de los principales creadores del género en nuestro país. Su personaje Elpidio Valdés, un mambí de las guerras de independencia en la Isla, representa sin dudas todo el valor, la tenacidad y patriotismo de los combatientes por nuestras guerras de independencia.
Elpidio Valdés no solo fue un personaje de filmes, sino además fue incluido en páginas de historietas en diferentes revistas infantiles nacionales.
Juan Padrón nació en Cárdenas, provincia de Matanzas en 1947. Aunque dibuja desde niño, es un autodidacta adquiriendo maestría durante su trabajo. Se inició en la sección fílmica de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, FAR, en el Departamento de Animación. En éstecentro labora en la animación de créditos de filmes y aprende a operar la cámara.
Posteriormente integra las páginas de los semanarios humorísticos El Sable y La Chicharra, así como colabora con la publicación DDT. También aportó su arte en la revista infantil Pionero, órgano de la Unión de Pioneros de Cuba, donde apareció por primera vez el popular personaje, el mambí Elpidio Valdés.
El caballito Palmiche, quién Elpidio lo entrena para la guerra, también resultó un animado de la preferencia de pequeños y mayores, donde entre ambos se suscitan simpáticas controversias Las viñetas humorísticas, históricas e ilustraciones de Padrón fueron editadas en diferentes países. Licenciado en Historia del Arte y ostenta la distinción, Por la Cultura Nacional.