Revista Visión
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2da Temporada/Junio 2025

Apuntes sobre la necesidad de una Estrategia Gubernamental de desarrollo de la Ciencia

Apuntes sobre la necesidad de una Estrategia Gubernamental de desarrollo de la Ciencia
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La revolución digital y la inteligencia artificial (IA), llegaron para quedarse, ya están aquí, lo invaden y transformarán radicalmente en menos de una decena de años a la economía, la política, la cultura, el pensar y la conducta de la Humanidad. De ahí la necesidad de una Estrategia Gubernamental de desarrollo de la Ciencia, para alcanzar la Soberanía científica, tecnológica y digital y lograr las Revoluciones Técnico-Industrial y Agropecuaria en municipios y provincias con una primera etapa en 2030.

De acuerdo con nuestra Constitución (Título II. Artículo 21) el Estado promueve el avance de la ciencia, la tecnología y la innovación como elementos imprescindibles para el desarrollo económico-social; igualmente implementa formas de organización, financiamientos y gestión de la actividad científica; propicia la introducción sistemática y acelerada de sus resultados en los procesos productivos y de servicios mediante el marco institucional y regulatorio correspondiente.

Estos principios constitucionales fueron refrendados por el Decreto-Ley 7/2020 del Sistema de Ciencia tecnologías e innovación y por el Decreto-Ley 96/2024, sobre nuevas normas del Sistema de Ciencia.

Es política nacional que la ciencia con las tecnologías y las innovaciones, debe ser la poderosa y determinante fuerza para la transformación económica. La ciencia es el asiento esencial del éxito, la sostenibilidad y la competividad del país, sin ella sería imposible transformar y desarrollar radical e integralmente a la economía en su conjunto y a los sectores de la agricultura, la industria, las exportaciones, la sustitución de las importaciones, el turismo, el comercio, los servicios públicos, elevar el nivel de la calidad integral de vida de la población, así como vigorizar la Tarea Vida.

Algunos relevantes científicos como el Dr. Agustín Lage, sueñan y laboran activamente, porque Cuba algún día pueda alcanzar la Soberanía científica tecnológica digital y llegar a ser una Sociedad del Conocimiento.

Para muchos esas son metas irrealizables, pero la Revolución nos ha demostrado que somos capaces de las mayores proezas. Ahora, la terca realidad nos obliga a luchar y lograr nuevas hazañas. De ningún modo podemos quedarnos atrás ante el indetenible y arrollador avance de la 4ta Revolución industrial.

En el 2024, el Consejo de Ministros aprobó la estrategia sobre el desarrollo de la ciencia, presentada por el Dr. Eduardo Martínez Díaz, en esos momentos ministro de Ciencia, Tecnología y Medio ambiente (Citma), con los elementos principales de las prioridades nacionales, en tecnología e innovación.

Cumpliendo los Decretos-Leyes antes señalados y la estrategia del Ministerio de Ciencia (Citma), se han dado pasos como el de crear Parques científico-industriales, el Consejo nacional de innovaciones y otras importantes iniciativas.

Tanto el Decreto-Ley 7/2020, como la estrategia del Citma, deberán tener un excepcional papel en el arduo proceso de alcanzar a largo plazo el propósito más importante y estratégico del país que consiste en iniciar y alcanzar la Soberanía científica tecnológica y lograr una Revolución técnico-industrial.

Hay estudiosos del tema que señalan que la mejor o quizás la única vía posible para alcanzar en un futuro esos ambiciosos y difíciles objetivos sería, que estos documentos legislativos y la aprobada estrategia del Citma, sirvan de base en la elaboración de una Estrategia Gubernamental para el desarrollo científico del país. O sea, un programa estratégico e integral de gobierno para hacer realidad lo que legislamos y acordamos oficialmente.

En 1959 la Revolución triunfó porque supo magistralmente unir al pueblo para realizar lo que era imposible, luego vinieron Girón, la Crisis de Octubre, la Guerra de todo el pueblo, Angola, el Periodo Especial, y posteriormente el enfrentamiento a la Covid19. Fueron tareas épicas en que el pueblo unido logró resistir y alcanzar objetivos trascendentales.

Ahora a este proyecto de estrategia gubernamental sobre el desarrollo de la ciencia, propone en otro microespacio diferente, repetir la epopeya y con la ciencia, la unidad y el esfuerzo de todos sin excepción, promover y alcanzar el desarrollo integral del país.

El proyecto plantea conectar y articular en un mismo empeño, la elaboración de esta estrategia gubernamental a las entidades científicas, incluidas las de ciencias sociales, con todos los Órganos del Poder Popular y de la Administración Central del Estado, BioCubaFarma y otras empresas; a las organizaciones políticas y de masas y a determinadas organizaciones sociales, como las de economistas, ingenieros, informáticos, comunicadores, periodistas, pedagogos, juristas, sociólogos, psicólogos sociales, escritores y otras.

Esta estrategia gubernamental sería el sustento para que cada órgano u organización nacional, elabore como parte componente de la estrategia gubernamental sus propios Programas de desarrollo científico-tecnológico con vínculos colaborativos y estrechos entre sí.

A la par, aunque la ciencia, servirá de sostén y empuje interactivo para todas las otras estrategias y programas de los órganos y organizaciones del país, dada su extraordinaria potencialidad, habrá de planear como revolucionarse asimismo constantemente en un mundo que cambia por segundos y maximizar su propio e integral desarrollo científico tecnológico innovador.

Planificar la estrategia gubernamental y luego organizar, controlar y evaluar sistemáticamente su realización será una tarea muy compleja, pero prometedora y transcendental. Solo con inteligencia creativa podremos articular de forma interactiva en un todo dialectico, a los órganos y organizaciones nacionales sin excepción, alrededor de la ciencia, para avanzar al país de manera precisa, integral y progresiva hacia la Sociedad del conocimiento, y la Revolución industrial, con una primera etapa en 2030.

El proyecto de Estrategia gubernamental para el desarrollo de la Ciencia, se basaría principalmente en: la planificación socialista, la ciencia, las tecnologías e innovaciones, la educación-capacitación y una sólida política de cuadros.

La Estrategia gubernamental haría suya los principios señalados por la estrategia del Citma, de promover conjuntamente con la Academia: la Inteligencia artificial (IA), la Nanotecnología, la nueva Biología, la Impresión 3D, la Robótica, la Automatización…

El proyecto gubernamental, estimamos modestamente, que debe ser planeado con la paulatina extensión y modernización de la digitalización con nuevas G, e infraestructuras. Es imprescindible lograr la tanto la gradual transformación digital del sistema empresarial estatal y las cooperativas, los servicios públicos, el comercio y las labores de los organismos y organizaciones.

La estrategia gubernamental, aparejada con la planificación y la educación-capacitación, debe facilitar el revolucionar y reorganizar los procesos empresariales, financieros, administrativos y los de inversión; generar novedosos patrones tecnológicos de producción y productividad; lograr cambios de modelos de negocios, de innovaciones, de diseños, de márquetin; normas de enseñanza, capacitación e investigación; nuevos estándares de emprendimiento.

Se prestaría en ella especial atención a la enseñanza, capacitación y recapacitación en el uso de las técnicas digitales y las de la Inteligencia artificial. Esas habilidades personales serán absolutamente determinantes para el desarrollo de la fuerza de trabajo y de la economía del país. Será decisiva una intensa e interactiva colaboración con países como Rusia y China y el BRICS.

De igual modo se debería sistemáticamente medir y evaluar en cada órgano, organismo y entidad, los resultados reales de la digitalización y de la IA, en cuanto a elevar la eficiencia y la innovación científica, la productividad (como elemento principal) y los costos y la calidad en la producción industrial y agropecuaria, la optimización de la gestión administrativa, así como la calificación de los directivos, técnicos y trabajadores, lo que iría acompañado por la lógica  disminución de los innecesarios.

Al mismo tiempo y con similar planificación, creatividad e ímpetu, es imprescindible para salvar a la Patria y la Revolución, proteger y fortalecer lo subjetivo. Es ineludible elevar la cultura integral y el pensamiento crítico de nuestro pueblo, fortalecer la formación de la identidad, los valores ético-morales, la solidaridad y la decencia.

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