Un día tan significativo como el del aniversario de la integración del movimiento juvenil cubano, y anunciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el 21 de octubre de 1965, surgió el diario Juventud Rebelde (JR), heredero de las tradiciones de la Revista Mella y que honraría siempre su nombre.
A sólo 18 días de la fundación del periódico Granma y al resumir las actividades del V aniversario de la integración del Movimiento Juvenil Cubano y la inauguración de los primeros Juegos Deportivos Nacionales, Fidel llamó al nuevo diario a recoger y continuar las tradiciones combativas y ejemplarizantes de la prensa juvenil cubana en toda la historia de Cuba, y así lo ha hecho.
Sobre el nuevo periódico dijo Fidel: “debe ser un periódico destinado fundamentalmente a la juventud, con cosas que le interesan a la juventud, pero que debe tratar de ser un periódico de calidad y que las cosas que allí se escriban puedan interesar también a todos los demás”.
El primer número circuló el 22 de octubre de 1965 con 16 páginas tamaño tabloide a tres tintas y se mantuvo con este formato durante casi tres meses, en que pasó al tamaño sábana y su tirada aumentó a 80 mil ejemplares.Juventud Rebelde se inició como vespertino en la capital y matutino en el resto del país con dos ediciones: la primera para el interior y la segunda para La Habana, que incluía la cartelera de cine y otros espectáculos.
Juventud Rebelde se caracterizó en una etapa por poseer un gran número de realizadores, dibujantes y diseñadores que, unidos con los de la publicación estudiantil Pionero que radicaba en el mismo local, posibilitaron la edición de suplementos, como el humorístico (de carácter crítico) El Sable (15 de noviembre de 1965) y el cultural El Caimán Barbudo (enero de 1966), que pasó a ser más tarde publicación independiente.
Apareció sustituyendo a El Sable el suplemento humorístico La Chicharra, de corta duración, y el 25 de febrero del 69 se comenzó a editar el Dedeté por un equipo de humoristas formados en el periódico.
En los primeros meses de 1968 empezó la tirada definitiva de dos ediciones: la primera para la capital (vespertina) y la segunda (matutina), que se confeccionaba horas después, para el resto del país.
Dentro de la historia del periódico se destaca la dirección acertada de notables periodistas cubanos que han dado lo mejor de sí por lograr resultados satisfactorios.
El 1 de junio de 1969 JR dejó de publicarse los sábados para circular los domingos como matutino para todo el país y apareció así Juventud Rebelde dominical. Ese mismo año creó la Escuela Nacional de Corresponsales.
En 1977 del seno de JR surgió Somos Jóvenes, revista bimestral juvenil que se independizó poco después. El 11 de enero de 1987 Juventud Rebelde pasó a imprimirse en offset en su nuevo local del Combinado Poligráfico de Periódicos Granma y volvió a ser tabloide después de 22 años.
En septiembre de 1990, por imperativos del Período Especial en Tiempos de Paz (la reducción del papel entre otros), pasó a ser semanario único que circulaba los domingos en todo el país, y en su última página insertó el suplemento humorístico DDT. Dos años después (1992) JR dispuso de Correo Electrónico y por esta vía podía circular en todo el mundo.
El 30 de enero de 1994, ya convertido en editora, publicó el semanario Opciones, con carácter financiero, cultural y turístico, devenido la primera publicación cubana destinada, fundamentalmente, a los hombres de negocios interesados en las ofertas inversionistas del país, empresarios nacionales y cuerpo diplomático acreditado en Cuba. Desde el 4 de julio de 1997, comenzó a circular en Internet la edición digital de Juventud Rebelde y el 28 de enero de 1998 también Opciones.
A medida que la economía del país se fue recuperando, algunos de los medios de prensa más importantes volvieron a su periodicidad anterior e incluso, en algunas ediciones, aumentaron el número de páginas. Así sucedió con Juventud Rebelde, quien dejó de ser semanario y pasó a editarse seis días a la semana, elaborando diariamente una edición digital capaz de recorrer el mundo con la verdad que, sobre Cuba, muchos medios de prensa tratan de silenciar.
Luego, las férreas medidas impuestas por el bloqueo de Estados Unidos afectaron duramente la importación de papel y Juventud Rebelde tuvo que mantener su tirada reducida y potenciar su circulación en Internet, pero a pesar de esas limitaciones continuó y continuará siempre siendo el Diario de la Juventud Cubana.