4ta Edición

2da Temporada

Los BRICS y Cuba

Los BRICS y Cuba

En el año 2001 el economista estadounidense Jim O´ Neill, usó el acrónimo BRICS, para designar a cuatro países emergentes Brasil, Rusia, India y China, los que por su desarrollo económico emergían como potencias. La iniciativa de crear una asociación partió de Rusia. Su presidente Vladimir Putin propuso la idea a esos tres países.

En 2006 con una reunión de ministros se funda como una alianza, agrupación, grupo o foro económico político. Ya en 2009 celebra su primera cumbre con jefes de Estado o 1ros Ministros. En 2010 con la incorporación de África del Sur se crea el BRICS como una alternativa al G 7 y al abusivo e injusto orden económico-político mundial liderado por EE.UU. y sus aliados occidentales.

El BRICS es una real alternativa al mundo unipolar dominado por EE.UU. y sus aliados occidentales y su objetivo declarado es el de que se desarrolle un mundo multipolar en paz y respetuoso de la soberanía de cada país.. No proclama ser un bloque antagónico con el G7. El lenguaje que usado es respetuoso y mesurado a diferencia del G7, que es ofensivo y amenazante.

Sus objetivos declarados son el promover el diálogo, la cooperación proactiva, pragmática y transparente encaminadas a servir a los intereses comunes de las economías emergentes y a los países en desarrollo. Es una organización integrada por países con gobiernos diferentes, culturas, idiomas y religiones disímiles.

En 2023 en la XV cumbre celebrada en África del Sur, a la que asistieron más de 60 países, fueron invitados a ingresar como miembros seis países: Etiopia, Argentina, Egipto, Irán, Arabia Saudita y Emiratos árabes unidos. La Argentina gobernada por el libertario fascista Javier Milei, rechazó su incorporación pese a los enormes beneficios que ello significaba. No conocemos que Arabia saudita haya aprobado oficialmente su ingreso como miembro.

En la XVI Cumbre anual de 2024 celebrada en Rusia, en la ciudad de Kazán, participaron más de 30 países. En el evento se acordó crear la condición de socios del BRICS para aquellos países interesados. Fueron invitados a ser socios 13 países: Argelia, Bielorrusia, Bolivia, Cuba, Indonesia, Kazajistán, Malasia, Nigeria, Tailandia, Turquía, Uganda, Uzbekistán y Viet Nam.

Los BRICS agrupan el 42 % población y el 30% del territorio mundial, el 18 % del comercio internacional y concentran el 33 % del PIB mundial. Se prevé que dominarán el mercado mundial en 2050.
No es aún una organización de la ONU, ni pretende ser un bloque militar como la OTAN. Está en un proceso gradual de crecimiento y fortalecimiento. Se encuentra en la fase organizativa de crear sus instituciones, estructuras y regulaciones legales de funcionamiento. Esto ocurre sorteando las existentes contradicciones internas.

Para sorpresa de todos Brasil vetó el ingreso de Venezuela como socio al BRICS. País que ha sufrido y sufre de las mayores y desvergonzadas agresiones y bloqueos por EU y sus aliados. Los diferentes argumentos expuestos por Brasil, son totalmente absurdos y francamente injerencistas. Brasil olvidó su importante papel histórico de luchar por la integración de los países latinoamericanos y del Caribe y lo que significaría la inclusión de la Venezuela sitiada, como socio al BRICS. Estamos seguros que Lula haciendo honor a su extraordinaria historia como político de izquierda, enfrentará resueltamente a las presiones de EE.UU., y a las de carácter interno y dará su visto bueno.

El BRICS y sus miembros enfrentan numerosos obstáculos, principalmente las sanciones impuestas por Estados Unidos a China y las amenazas de recrudecer su guerra comercial, así como sus provocaciones militares utilizando a Taiwán; la política de sanciones y la participación de la OTAN en la guerra contra Rusia, con la excusa de ayudar a Ucrania; las acciones guerreristas, provocadoras y genocidas de Israel en Gaza y en el medio oriente, con el objetivo de internacionalizar el conflicto…

La organización va dando progresivamente pasos seguros como el de implantar que en el comercio entre ellos se usen las monedas nacionales. Esto no les impide usar el dólar en sus relaciones comerciales financieras con otros países ajenos al BRICS. Es conocida la constitución de un banco de desarrollo del BRICS. Entre sus proyectos están el crear una moneda propia, fundar una nueva institución alternativa al sistema SWIFT, la red de pago liderada por EE.UU., que al agrupar a los 11 mil bancos más importantes de mundo facilita el movimiento y la trasferencia de capitales entre países, así como instituir una Bolsa BRICS de cereales.

Aunque repetidamente exponen que su política monetaria no está dirigida contra el dólar. Estados Unidos ha amenazado con sanciones a los países que no quieran usar su moneda, pues de ella depende totalmente su economía imperial depredadora. Desde que el gobierno de Richard Nixon en la década de 1970, eliminó el respaldo en oro que sustentaba el valor del dólar, este solo está respaldado por la confianza. Esto ocurre, cuando Estados Unidos se debilita, ha perdido su hegemonía manufacturera y su economía real productiva ha sido sustituida gradualmente por una financiada e irreal.

El denominado como mundo occidental, se encuentra inmerso en un proceso de decadencia integral económica, moral, política y social. El auto llamado jardín del mundo, ve como desaparecen paulatinamente tanto el Sueño americano, como el del Estado de bienestar europeo. EE.UU. y Europa sufren una enorme y al parecer indetenible deuda pública, que los aplasta cada vez más por el pago de los intereses; déficits fiscales y comerciales que los obliga a endeudarse más; los crecientes gastos militares; la perenne inflación; el empobrecimiento de sus poblaciones, la crisis migratoria, el desmesurado incremento de la corrupción; el aumento del delito, el crimen organizado y el tráfico y consumo de drogas, personas y armas. A la par se concentra cada vez más la riqueza del mundo en un puñado de personas.

Cuba y los BRICS
Esta es una única y extraordinaria oportunidad para la Cuba socialista, bloqueada cruel e ilegalmente por los gobiernos de Estados Unidos por más de 60 años, para con la colaboración de los países del BRICS superar la enorme crisis integral que sufrimos y desarrollarnos sobre sólidas y sostenibles bases económicas.

Reconocidos analistas políticos y económicos resaltan que la tarea para Cuba no será nada fácil e insisten en la necesidad de que hagamos profundas transformaciones y puntualizan en las diversas dificultades y tareas a las que nos enfrentaremos:

1 El primero de los puntos que todos sugieren es solucionar el grave problema cambiario de nuestra moneda y reducir la inflación, sin lo cual sería imposible comerciar con los países del BRICS.

2 Otros objetivos serían dirigir los esfuerzos a remediar el complejo problema de la falta de recursos energéticos y de la capacidad de generar la electricidad necesaria. Sin olvidar los actuales problemas del agua, necesaria para muchas de las transformaciones industriales, agropecuarias y para la población.

3 Es ineludible estudiar con profundidad y ejecutar sin dilaciones oficinescas, como desburocratizar, fortalecer y agilizar el determinante sistema bancario y el comercio exterior, para enfrentar esta nueva realidad.

4 No subestimar y hacer uso de una real, objetiva y útil planificación socialista para enfrentar con la mayor profesionalidad los objetivos que nos propongamos.

5 Digitalizar y modernizar nuestros métodos de trabajo, para garantizar la factibilidad y calidad integral, así como la rápida aprobación de los proyectos que Cuba presente o los de la contraparte, velando siempre que lo que acordemos nos beneficie. Es necesario trabajar con equipos de calificados asesores jurídicos.

6 De igual manera elevar la capacidad de controlar y por encima de todo cumplir en calidad y tiempo lo acordado, así como exigir lo mismo a los socios extranjeros.

7 Un objetivo a tener en cuenta siempre será el pensar en cómo y cuánto, podrían beneficiar los proyectos a elevar las exportaciones y a la sustitución de las importaciones.

8 En cada proyecto con la parte extranjera tener en cuenta cómo y cuánto podría aportar al desarrollo científico, tecnológico y a las innovaciones a Cuba.

9 Otro aspecto importante es que los negocios acordados para la parte cubana pueden tener inicialmente el carácter de maquilas-ensambladoras, pero que el objetivo final debía ser alcanzar a fabricar totalmente el producto.

10 Velar desde el principio por la honradez y la transparencia para que no se incremente el fenómeno de la corrupción en sus múltiples formas. No olvidar el fortalecimiento de los equipos de auditores.

11 Jerarquizar a Rusia en primer término, pero es imprescindible multiplicar los esfuerzos directamente con China, Viet Nam y Venezuela, así como trabajar obstinadamente por establecer activos vínculos con todos y cada uno, tanto de los miembros del BRICS, como de los socios, para ampliar y multiplicar las relaciones y utilidades económicas. Sin olvidar a México. Destacar la especial importancia en las negociaciones del nivel y de la calidad de las relaciones personales internacionales.

12 Necesidad de avalar la participación en igualdad de condiciones de las empresas estatales, las cooperativas urbanas y agropecuarias y las empresas privadas medianas y pequeñas. Es imprescindible para la Cuba socialista, terminar de legislar todo lo concerniente a las empresas privadas.

13 Aplicar una política de cuadros que avale el seleccionar a cuadros con una alta profesionalidad, confiabilidad y honradez, así como contar con programas permanentes de recalificación. Resaltar que para obtener éxitos debe primar el principio clave de que en toda política de cuadros la movilidad o sea la permanencia, la liberación o la promoción de los cuadros, dependerá siempre de los resultados alcanzados. No dilatar, ni titubear, en los casos en que objetivamente sea necesario liberar a un cuadro.
14 Planear la participación activa del pueblo en los proyectos que se desarrollen.

15 Los medios de prensa deben jugar un gran papel, tanto en la crítica oportuna, como en la información pública.

La aprobación de Cuba como asociado al BRICS, es una prueba innegable de la confianza que depositan en nosotros y de la capacidad que el país y su pueblo tienen para responder exitosamente como socio a los BRICS.